La Habana, ciudad Maravilla, dame sus latidos y moveré Cuba . Sería un tanto descabellado pensar que la capital de la isla no reúne suficientes atractivos para cautivar a los visitantes foráneos. De hecho, haber culminado el año 2016 con más de cuatro millones de turistas que visitaron nuestro país, de ellos un elevado número con La Habana como epicentro de sus actividades, constituye una prueba más que latente.
Si la vida nocturna bohemia de La Habana, su ritmo trepidante y las bondades del centro histórico o Miramar, no constituyen platos fuertes suficientes para alimentar por completo el chip de diversión que porta su corazón, a continuación les ampliaremos el el abanico de opciones con cinco lugares que desde la capital usted podrá visitar en un tour de un día o dos.
Por su cercanía, hemos decidido iniciar el recorrido por las Playas del Este: como su nombre lo indican y buscando ese punto cardinal luego de cruzar el Túnel de la Bahía, a la distancia aproximada de 25 km usted podrá disfrutar de una combinación de playa, sol y arenas blancas. Más de dos kilómetros de balneario, con inicio en Tarará, y las inmediaciones del Mégano y fin en Brisas del Mar, le permitirán relajarse, absorber una bocanada limpia de brisa costera, dorar su cuerpo y beber un agua de coco con ron, un mojito o una refrescante cerveza Cristal. También podrá degustar un almuerzo y si decide prolongar su estancia, los hoteles Atlántico y Tropicoco se cuentan entre las posibles opciones para pasar una noche.
En sentido diametralmente opuesto y con la madre Natura abriéndole los brazos a todo visitante, baste recorrer 75.2 km en una hora aproximada y chocar con ese magnetismo de Las Terrazas. Declarada reserva de la biósfera en 1985 por la Unesco por su ubicación en la Sierra del Rosario, desde entonces se proyectó el desarrollo turístico de la comunidad de igual nombre, perteneciente al municipio Candelaria en la provincia de Artemisa. Si busca llenar sus pulmones de oxígeno, bañarse en las gélidas y cristalinas aguas del Río San Juan, vivir una excursión por bosques húmedos y de verdor intenso, ese es el paraje que debe seleccionar.
Por si no bastara, también la adrenalina podrá ponerla al límite, si se decanta por el Canopy Tour, un recorrido por cables de acero aéreos de 1.6 Km de longitud, desde donde se disfruta del paisaje de la Comunidad. Personal altamente calificado y equipamiento del más alto nivel aseguran la expedición extrema con límite de edades comprendido entre dos y 80 años. Se requiere además no estar operado recientemente, no estar bajo los efectos de bebidas alcohólicas, y no ser hipertenso. Si usted es huésped del Hotel Moka o de una de las cabañas del río San Juan, recibirá un precio especial.
En esa misma dirección, atravesando buena parte del territorio de la provincia de pinar del Río y los campos de tabaco mejor cultivados de Cuba, llegaremos a Viñales, luego de rodar 183.4 km. El Valle lo merece, no solo por su vista espléndida, que convida a perder la mirada en el horizonte, por los paisajes, por un paseo al Mural de la Prehistoria, o pensar que está rodando los Goonies o la Cueva de los Misterios en la Cueva del Indio…
También por el espectro variado de ofertas gastronómicas que le permitirán hurgar en los placeres del paladar pasando por varios platos tradicionales cubanos, como cerdo asado, yuca con Mojo, tostones, congrí o moros y cristianos y acompañarlo con jugos y postres caseros.
Una franja de restaurantes y paladares se extiende a lo largo de toda la calle principal de la comunidad y luego en el camino de ascenso al Valle, antes de tener contacto visual con los Mogotes.
El Valle de Viñales, y gran parte de la sierra que lo rodea es aprobado en 1999 como uno de los Parques nacionales de Cuba y en diciembre de ese mismo año fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco.
El Rancho San Vicente y el fabuloso Mirador de Los Jazmines se cuentan entre otras opciones para el disfrute. Los mogotes constituyen formaciones geomorfológicas muy singulares donde algunos de ellos llegan a medir centenares de metros de altura. Estos mogotes semejan una gran diversidad de formas. Solo son comparables con los localizados en China y la península de Malaca.
En el valle existen otras elevaciones, como Alturas de Pizarras, las cuales están constituidas por una variedad de rocas, las más antiguas existentes a lo largo del país y también en el área caribeña.
Toca viajar nuevamente hacia el Este desde la capital. En el horizonte de emociones, el principal balneario de nuestro país. ¡Varadero! Aguas azules y cristalinas, arenas blancas, franja de 22 km de playa en la península o Punta de Hicacos que constituye el punto más septentrional de Cuba . Varadero es un combo de opciones y disfrute, que pueden ir desde el buceo, baños e interacción con delfines, jugar golf, o desposarse y tener la Luna de miel de sus sueños.
Considerado el principal polo turístico del país con aporte aproximado entre el 30 y el 40% de los ingresos de ese sector y capacidad habitacional estimada de 25 300 habitaciones en Varadero resultará cuasi obligatorio prolongar su estancia por más de un día. Le aseguro que no se arrepentirá.
También perteneciente a la provincia de Matanzas, pero hacia la costa Sur, hallamos el epílogo de nuestro recorrido. No por último este paraje deviene el menos atractivo. Hablamos de la Ciénaga de Zapata: ecosistema pantanoso y considerado el mayor humedal del Caribe insular con un espacio aproximado de unas 300 mil hectáreas. Presenta una longitud de 175 km de este a oeste, entre Punta Gorda y Jagua, y ancho máximo de 58 km de Norte a Sur.
Predominan allí paisajes de llanuras bajas, pantanosas y semipantanosas, vegetación de sabanas naturales de alto valor estético y paisajístico, tales como la Laguna del Tesoro y la cuenca del río Hatiguanico, principal arteria fluvial de la zona, así como Playa Larga y Playa Girón. En su conjunto, la vegetación de la Ciénaga de Zapata constituye una de las áreas verdes más importantes de Cuba y, por las propias especies de la flora y la fauna que alberga, representa un lugar de interés mundial.
Podrá además de bañarse en sus playas o cenote, y apreciar especies endémicas como el cocodrilo cubano o la Ferminia, disfrutar un paseo en lancha por la Laguna del Tesoro, la visita a Guamá o una estancia en el criadero de cocodrilos, sin correr riesgos de caer en sus fauces.
Sencillamente un abanico de opciones amigos. Yo, como buen cubano, en cada una hallo disfrute y peculiaridades. Estoy convencido que a usted, en calidad de visitante, le sucederá otro tanto sin renunciar a La Habana como epicentro.